viernes, 21 de diciembre de 2007

Corfú 3

Nos habíamos quedado en la hora de la siesta del segundo día de congreso. Y como ya os adelantaba, después de un día y medio asistiendo a diferentes presentaciones, decidí que era el momento de hacer algo de turismo. Mi intención era visitar el Aquileion, palacio de verano de la emperatriz Elisabeth de Austria (Sisi emperatriz), y hacer un buen montón de fotos para llevárselas a mi mujercita, que le encanta este personaje.

El problema era la logística, porque estábamos a unos cuantos kilómetros del lugar, y el transporte público brilla por su ausencia. La solución vino en forma de ciclomotor; la isla está llena de chiringuitos de alquiler de ciclomotores, motos y coches. Goyo, uno de los participantes del congreso, de la universidad de Zaragoza, ya había alquilado una para toda la duración del congreso, y además se ofreció a acompañarme a hacer algo de turismo. Así que me alquilé un ciclomotor, y salimos en dirección al norte, en busca del palacio de Sisi.


Llegamos al Aquileion, después de subir por una empinada carretera y nos encontramos sobre una colina, frente a un hermoso palacio neoclásico construido en mármol blanco, y rodeado de enormes mimosas y cipreses. En el interior del edificio pueden visitarse un par de salones, la habitación de la emperatriz, y una colección de fotos y objetos personales de la familia imperial. A lo largo del lado oeste del edificio, un camino sube entre huertos hasta llegar a los jardines de la parte trasera, orientada hacia el norte.


Los jardines, se sitúan sobre una plataforma con una camino central y pasajes laterales de estilo romántico. Antes de llegar a la estatua que preside el jardín, pasamos por delante de una enorme palmera cica con varios brazos. A los pies de la estatua podemos disfrutar de unas espectaculares vistas de la ciudad de Corfú y de la costa este de la isla.


Volviendo hacia el sur, nos dirigimos de nuevo hacia el edificio, para llegar a la parte trasera del mismo. Subiendo por unas escalinatas llegamos a una nueva terraza, en la que nos encontramos con una impresionante estatua del guerrero Aquiles, herido por la flecha de Paris. La estatua es espectacular, por los detalles de la anatomía y el gesto desencajado del guerrero. Subiendo un nuevo tramo de escaleras, ya junto al edificio, encontramos a las nueve musas en una nueva terraza rodeada de enormes árboles. Por la ladera este baja una estrecha escalera, rodeada de vegetación, y flanqueada por estatuas que lleva de nuevo a la parte delantera del edificio.

Acabada la visita del palacio, volvimos a la carretera, para dirigirnos a Kerkyra, la capital de la isla. A la llegada, un largo paseo marítimo nos lleva hasta la antigua fortaleza, de origen bizantino, mientras se puede disfrutar de unas bellas vistas de la pequeña bahía de la ciudad, y de la costa griega a escasos kilómetros de la isla. Debido a la hora no pudimos visitar la fortaleza, así que decidimos adentrarnos en el barrio antiguo de Kerkyra, que es además el centro turístico y comercial de la ciudad.


Sus calles, que transcurren entre antiguos edificios de los siglos XV al XVII, de la época de la ocupación veneciana. Si el paseante es capaz de obviar las innumerables tiendas de recuerdos turísticos, podrá imaginar el aspecto que tendría cualquier ciudad del norte de Italia en el siglo XVII. Algunos rincones entre las callejuelas, junto con las pocas tiendas 'de toda la vida' que quedan en el barrio le dan un aire muy auténtico a esa zona de la ciudad.

En el extremo opuesto de la parte antigua puede verse, casi desde cualquiera de sus calles, la enorme mole de piedra, con muros de varias decenas de metros de altura, que protegen la fortaleza veneciana. Aunque, de nuevo, no pudimos visitar la fortaleza, pues ya había cerrado al público, si que pudimos disfrutar del atardecer y de las vistas de la zona norte de la isla, y de la costa continental, que se adentra ya en Albania.



Llegados a este punto, nos retiramos de nuevo hacia el sur, en dirección al hotel, al que llegamos ya anocheciendo. Devolví la moto al chiringuito donde la había alquilado, y subimos al hotel, a disfrutar de una buena cena. El día acabó con una tranquila velada, antes de retirarme, esta vez para hacer maletas y preparar el regreso a casa.

En fin, un viaje algo apresurado pero interesante. Aunque, todo hay que decirlo, con un cierto sabor agridulce por no haberlo disfrutado con mi familia, que en esta ocasión no pudieron acompañarme.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Corfú 2


El lunes, segundo día del congreso, me tocaba leer a primera hora de la mañana, así que no estiré mucho la velada (ved el episodio anterior). Además, pensé que podía ser buena idea levantarme antes de la salida del Sol, y hacer algunas fotos con mejor luz que el día anterior. Así que, ni corto ni perezoso, a las 6 y media (5 y media hora española) me levante. Con más sueño que vergüenza, y cámara en ristre, bajé a la planta principal del hotel y empecé a deambular por los jardines.

Como el hotel está construido en forma de terrazas, hay varias plataformas desde las que hay una buena vista del mar, y del propio edificio. Las piscinas, situadas en el borde de cada terraza, y rodeadas de pequeñas edificaciones de aspecto mediterráneo, me hacían tener la sensación haberme colado en un poster de agencia de viajes. Así pasé un rato, hasta que la luz empezó a perder esa magia que sólo tiene durante la salida y la puesta del sol.







Tras un merecido desayuno (digo yo que después de haberme levantado a las 6 ¡bien me merecía un desayuno!), recogí los bártulos fotográficos, y me enfundé de nuevo la mochila y la chapita de congresista despistado, para irme a la sala de conferencias, y pasar el resto de la mañana asistiendo a las diferentes sesiones.

Pero antes de continuar con el viaje, quiero dedicarle unas lineas a los amantes de la cocina (¡me temo que estoy rodeado de ellos!). En la entrada de ayer no hice ninguna mención a la comida, así que hoy voy a dejaros algunas notas sobre lo que comí los dos días. Para comer nos bajamos a un chiringuito que había junto a la playa, al pie del hotel. Lo cierto es que, no conociendo la cocina griega, me iba a tener que fiar de lo que me sirvieran (siempre que como en el extranjero un plato más o menos típico, pienso en las paellas que ofrecen, por ejemplo, en los bares del Paseos del Prado en Madrid). Pero no me llevé mala impresión.

Del menú me llamaron la atención, además de la Moussaka, dos platos que se llamaban pastitsio y pastisada. De acuerdo con las explicaciones de la camarera que nos atendió, era dos platos de pasta con carne. El primer día, que ya os relaté en la entrada anterior, me decidí por la pastisada. Se trata de un estofado de carne, con salsa de tomate, y mezclado con espagetis. La carne me resultó bastante similar al estofado de ternera que se prepara aquí en España, pero mucho más sabroso y especiado. El segundo día, en vista de que el día anterior la comida me había parecido bastante casera, pedí un plato de mousaka. De nuevo, salvo por las especias, más abundantes que lo que es habitual aquí, he de decir que no me sorprendieron excesivamente los sabores. Pido disculpas a los blogosféricos cocinillas, porque no hice fotos de la comida. Prometo portarme mejor la próxima vez.


Y por hoy vamos a dejarlo aquí. Tras la comida volvimos al hotel para asistir a la sesión plenaria de la tarde, y al finalizar decidí que era hora de hacer algo de turismo. ¡No iba a estar dos días en la isla y no ver absolutamente nada! Pero esto ya os lo contaré en una nueva entrada.

martes, 11 de diciembre de 2007

Corfú


A la mañana siguiente de mi llegada al hotel me levanté y, tras un buen desayuno, fui a darme una vuelta por el hotel... y la verdad es que el hotelito que eligieron los organizadores del congreso se las trae.

Lo primero que llama la atención es una capilla que hay a la puerta del hotel. No se si es de verdad, pero lo cierto es que da el pego. El hotel está situado sobre el mar en la ladera de un monte. La isla es una franja alargada de tierra frente a la costa norte de Grecia, y la montaña sale con una pendiente considerable desde el agua, así que la vista desde la planta principal del hotel es espectacular. Lo cierto es que las fotos no le hacen justicia, pero el tiempo estaba bastante brumoso. Aproveché que el sol no estaba aún muy alto, y me di una vuelta por los jardines del hotel con la cámara.






El resto del día lo pasé asistiendo a diferentes sesiones del congreso, y tomando que algún que otro café (al módico precio de 3€ el café ¿quién me dijo que Grecia era barato?) en la buena compañía de la gente a la que fui conociendo (un saludo para todos ellos). La jornada acabó en el típico poscolabis de bienvenida, en el que el vino y unos aperitivos ayudan a romper el hielo entre los participantes del congreso, y a entablar conversación sobre cualquier tema... incluídas las matemáticas, claro.

Podéis encontrar más fotos en el lugar habitual.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Blade Runner (friki days)

Llevaba tiempo esperando a que saliera la nueva versión de Blade Runner. En realidad, no me interesaba la nueva versión, sino la posibilidad de ver en cine una película que sólo habíapodido ver en VHS. El caso es que hace un par de semanas, un compañero de trabajo, casi tan friki como yo para estas cosas (si, soy un friki, pero lo disimulo bien en favor de la salud social de mi amada esposa) me dijo que ya había salido y que había ido a verla. ¡El día había llegado! Pero lo que me acabó de decidir fue cuando me enteré de que la echaban en V.O.S. ¡No podía dejar escapar aquella ocasión! (véis como soy un friki!).

Así que me armé de... de nada, que para ir a ver Blade Runner no hace falta nada, y me fui al Kinépolis de Paterna. Pedzo de cines, por cierto. Da igual donde te pongas. Las pantallas son enormes, y hay una distancia considerable a la primera fila, así que aunque te toqué allí se ve de puta mare.

LLego al cine, un martes cualquiera de noviembre, y allí no llegábamos ni a cuatro gatos. Dos y medio como mucho. Entro a la sala, y medio gato; diez o doce frikis, entre los 30 y los 45, en grupitos de dos o tres, haciendo comentarios eruditos sobre la versión de 1982 y sobre lo que habían leído de la nueva versión, un par de parejas y dos o tres despistaos como yo, que íbamos solos. Que conste que no critico a los 'aprendices de Garci'; que si yo no hubiera ido solo, hubiera sido el primero en apuntarme a la tertulia de 'que grande es el cine'.

Pero bueno, a lo que vamos. La película una pasada. La última vez que la vi, creo que fue en el instituto, en clase de 'ética'. Y lo cierto es que lo que mejor recordaba era la estética de la misma, y el ritmo pausado con el que transcurre. Se puede masticar cada escena, y cada escena es un espectáculo en cuanto a fotografía, iluminación, composición.

Una de las cosas por las que me gusta ir al cine es porque en televisión cortan las películas por los lados, porque parece que hay mucha gente que prefiere ver toda la tele llena. Pero en películas como esta, es un auténtico crimen. En algunas secuencias, cortar la imagen por cualquier lado es cargarse completamente la composición.

La estética de la película es brutal. Una imagen del mundo en 2019 globalizado, dominado por grandes multinacionales, sórdido y en decadencia. El aspecto de la gente, y de la moda, no muy lejano al aspecto que podemos ver hoy en día, aunque influido por la estética de los 80. Y eso sí, lleno de pantallas por todas partes... de pantallas de tubo claro. De TFTs, nada de nada.

En fin, una obra maestra del cine.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Se ha ido uno de los grandes


Esta noche nos ha dejado Fernando Fernán Gómez. Actor, director, novelista, dramaturgo, poeta, académico... pero, por encima de todo, un intelectual de los que van quedando pocos en este país.

Para quién quiera conocer un poco sobre su persona, recomiendo la lectura de La buena memoria. Una entrevista realizada por Diego Galán, junto a su amigo, el también desaparecido Eduardo Haro Tecglen.

Vaya desde aquí mi mayor reconocimiento a este monstruo de la cultura hispánica del siglo XX.

jueves, 8 de noviembre de 2007

Valencia - Corfú

El periplo a Corfú empieza bastante antes de subirme al avión. Allá por mayo, se me metió en la cabeza que tenía que mandar un artículo a un congreso que vi anunciado, porque iban a presentar ponencias invitadas dos eminencias del cálculo numérico. C. Boor, importante figura en la aproximación de funciones, y autor de uno de los libros con los que yo estudié en primero; y W. C. Gear, padre de unos cuántos métodos numéricos que espero usar en mi tesis. Así que, sin pensar demasiado en la logística, convencí a mi costilla y colega pofesioná, y nos pusimos manos a la obra. Entonces no sabía que se iba a convertir en una carrera de obstáculos.

A finales de julio nos confirmaron que nos habían aceptado el artículo. Miramos las fechas del cogreso (vale, sí, debería haberlo mirado antes) y... primer problema: la misma semana tenemos que dar unos cursos aquí, en Valencia. De entrada, quedaba descartada la posibilidad de ir los dos, y además debia buscar a alguien que diera los cursos por mi.

Pero lo peor fue cuando empecé a buscar billete de avión. Imposible llegar a la isla en esas fechas. Corfú es una isla pequeña, destino turístico de multitud gambas británicas y alemanas, pero con pocos vuelos fuera de esos países, y para colmo, el primer día del congreso había elecciones presidenciales en Grecia. Las opciones eran pocas, con combinaciones que me obligaban a pasar tres o cuatro días dando tumbos por los aeropuertos de media Europa. Y encima con precios por encima de los 2000€.

Después de pasarme tooodo el mes de agosto buscando vuelo, la última semana, miro en la página de Aegean y me encuentro con ¡¡UNA plaza!!
- ¡Mía! -pienso.
¡Ja! ¡Y una mierda! Relleno todo el formulario, tarjeta de crédito y todo, aprieto el botón...
...
..
.

¡¡Esto no va!!


Después de más de un cuarto de hora con el navegador frito, me sale un mensaje avisando de que no quedaban plazas en el avión ¡Y faltaban dos días para poder confirmar el hotel del congreso! Al final, me tocó comprar un billete en clase preferente, que pillé de chiripa y gracias a una cancelación. Por fin, el viaje el 15 de septiembre, con salida de Valencia a las 8 de la mañana, y llegada a Corfú a las 8 de la tarde hora española, con escala de más de dos horas en Madrid y Atenas.


¿El viaje? Se podría resumir en:
Madrugón - Espera en Manises - Vuelo a Madrid - Muérte de asco en Barajas - Rompe zapato en Barajas - Compra zapatos en Barajas - ¡Joder, que caras las tiendas de Barajas! - Rómpete el cuello intentando dormir en el avión - Muérete de asco en Atenas - Vuelo a Corfú - Busca taxi, y reza para que no te estafen.

Diez minutos y 25€ euros después, llegué al hotel, con ganas de pocas cosas. Así que cené y me subí a la habitación a ver (en griego y contra Grecia) el partido de semifinales del Eurobasquet. Menos mal que ése lo ganamos.

(Más fotos aquí.)

jueves, 25 de octubre de 2007

¿Hay algún periodista en la sala?

Acabo de leer en Barrapunto que en Italia están elaborando un proyecto de Ley por el que obligarían a todos los bloggers a tener un periodista como "editor responsable" del blog.

Y la cosa va más allá; se les obligaría a registrar cada blog, y a pagar impuestos, aunque no haya ninguna actividad económica relacionada con el blog. Por lo visto, esto afectaría a cualquier italiano que tenga una página web, del tipo que sea, y haría falta que hubiera una empresa editorial detrás, con un periodista acreditado al cargo del mismo. Además, el propietario debería responder ante cualquier difamación, pudiendosele exigir responsabilidad penal.

¿Algún italiano voluntario para poner una web en estas condiciones?

Ahora bien. ¿Cómo piensan controlar qué páginas están llevadas por italianos y cuáles no? ¿Van a revisar todas las conexiones a los servidores que contengan páginas en italiano? ¿Cómo van a impedir que un italiano gestione con un nombre ficticio una web alojada en España? Necesitarían una orden de un juez español para obtener un registro de conexiones, y eso sólo se puede hacer si hay indicios de delito...

Me da a mi, que la aplicación de esta ley va a ser inviable. Como en casi todo lo que tiene que ver con la tecnología, los políticos legislan de oído. Veremos como acaba el tema.

miércoles, 24 de octubre de 2007

Blogger Awards y enlaces

El detalle de Tonicito de darme el Thinking Blogger Award ha venido en un momento muy oportuno, porque levaba varios días intentando escribir algo, y no encontraba el momento. Y para no perder la racha, me pongo de nuevo a las teclas.

A los premios bloggeros siempre les he encontrado un fallo; el número de premiados. Vale que la idea es que la gente destaque sus blogs favoritos; pero si hay que elegir muchos blogs, al final siempre se ponen algunos para rellenar. Aunque sea a costa de darle el premio Flower-Power al blog de Motortriturador.com.

Y esto tiene dos inconvenientes; el primero es que los enlaces que van surgiendo para un cierto premio, al final no sirven como una lista de blogs sobre el tema del premio; el segundo, que al final a todos los blogs nos acaban dando un premio u otro.

No deja de resultar paradójico que en el post que crea los Thinking Blogger Awards haya una colección de enlaces muy interesantes sobre este tema. Son enlaces a posts de otros bloggers que criticaban la cadena de memes 2000bloggers.

El problema es que en las instrucciones de este meme, se indicaba que había que conservar todos los enlaces anteriores en el nuevo post, y a continuación añadir los nuevos. Esto daba lugar a un crecimiento exponencial del número de enlaces, comprometiendo la utilidad de google y de Technorati, al llenar la red de enlaces ficticios.

Así que, bloggeros míos, si tenéis intención de crear el Superdiscofashion Blogger Award, proponed que sólo se mencione a dos o tres bloggers como mucho.

martes, 23 de octubre de 2007

Un blogger pensón

O al menos, eso es lo que dice Tonicito en su blog Und komisch spricht das Murmeltier. Desde su rincón de la blogosfera me ha incluído en su lista de bloggers que le hacen pensar; me ha honrado con el Thinking Blogger Award.


La verdad es que debería decir que el tema de los memes no me va en absoluto, pero tengo que reconocer que me ha hecho ilusión. Sobre todo, porque en la corta andadura de este humilde (tirando a escaso) blog, Tonicito me ha demostrado que hay, al menos, una persona que lo lee (tú no cuentas, amor, que se que me lees desde el cariño y pa que no me deprima).

Ahora me corresponde, de acuerdo con las instrucciones del premio, elegir a otros cinco blogs que me hacen pensar a mi. Y lo tengo muuuy complicado. En primer lugar, porque soy muy novato en este tema de los blogs, y apenas leo unos pocos de mis amigos de toda la vida. Y en segundo lugar, ¡porque me temo que están todos premiados!

Pero como al final se trata de compartir algunos enlaces a blogs interesantes, voy a elegir los tres blogs que más me hacen pensar. Los elegidos son uno que no leo, y otros dos que conozco desde hace poco:
  • Ni Libre ni Ocupado: Este blog no lo leo casi nunca, pero no me hace falta; soy lector consorte, y no hay día que no comente en casa alguna de sus entradas. Así que es seguramente el que más me hace pensar.

  • En el Aire fm ))) el Blog de Jero Moreno: Porque habla de casi todo y no tiene reparos en decir lo que piensa, sobre cualquier tema.

  • En Serio y en Broma: Porque en cada entrada hay siempre algún sano ejercicio, ya sea mental... o culinario.

Y, por supuesto -y no es por agradecerle la mención- el blog de Tonicito, Und komisch spricht das Murmeltier, que es mi blog de cabecera. Por sus fotos y sus reflexiones, que ofrecen un punto de vista muy interesante sobre cosas cotidianas, y que nos recuerdan que hay tantas formas de entender la vida como habitantes en esta pelota azul.

jueves, 11 de octubre de 2007

Memoria y España Cañí

Contrasta la postura del PP respecto a la Ley de Memoria Histórica con la capacidad de su líder de hacer memoria y rescatar esquemas de discursos Históricos, en su reciente llamamiento al exhibicionismo patrio.

Para ellos, reconocer que las víctimas de la dictadura son víctimas es reabrir viejas heridas. Algunos incluso reclaman que hubo víctimas en los dos bandos. Olvidan que sus víctimas tuvieron al menos 40 años de reconocimiento. En este caso recordar, dicen, no es bueno.

Sin embrgo, parece que sí son capaces de recordar viejas consignas, para insuflarnos de ardor patriótico, cara a nuestra Fiesta Nacional. Al menos, a mi su discurso se me parece bastante a lo que, hace 51 años, decía otro político de talla (pequeña): "La unidad de la Nación hemos de construirla sobre lo que nos une y no sobre lo que nos separa, sobre las esencias más que sobre las formas",recordándonos también que es necesario "Mantener en lo eterno un motivo de orgullo nacional" (del discurso de año nuevo de 1956, con motivo de sus "veinte años de paz").

Tal vez sea esto lo que algunos llaman memoria selectiva.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Metacoincidencias

La coincidencia de esta semana tiene cierta gracia, porque se trata de una coincidencia relacionada con una conversación de café... sobre coincidencias. En definitiva, una metacoincidencia.

El caso es que, a raíz del estreno en cuatro de la serie Seis Grados he tenido últimamente varias conversaciones sobre la certeza o no de la Teoría de los Seis Grados. Según esta teoría, podemos encontrar una cadena de seis personas, conocidas entre si, que relaciona a cualquier par de personas del mundo.

Yo personalmente soy un creyente de esta teoría, al menos en su idea básica. No se si podría encontrar una conexión de esta forma con cualquier persona, pero no me sorprende en absoluto encontrar conocidos comunes durante una conversación con un completo desconocido, en un tren, una sala de espera,... John Allen Paulos, en su libro El hombre anumérico, deja bastante claro que la probabilidad de no encontrar ninguna conexión es muy baja. Hay resultados básicos de, por ejemplo, la teoría de grafos que lo demuestran.

La semana pasada, asistí a un congreso en Grecia, en el que conocí a varias personas de Valencia y Alicante. Como era de esperar, viniendo todos del mundillo de las mates, fue fácil encontrar conexiones entre nosotros. En concreto, conocí a una compañera de promoción de Antonio, mi profesor de mates del instituto, y a un compañero de facultad de Carlos, matemático de Alicante, amigo de mi hermano y alumno de doctorado de Antonio.

Hasta aquí todo normal. Lo curioso empieza ya de vuelta en Valencia, cuando recibo una llamada de teléfono de Carlos interesándose por una beca en mi departamento.
- ¿Ignacio? Soy Carlos, el estudiante de doctorado de Antonio.
- ¡Coño Carlos, cuánto tiempo! Esta semana, precisamente, he estado en Grecia con un compañero tuyo de la facultad.

Pero lo que casi colmó mi capacidad de no-asombro fue cuando un compañero del departamento me paró por el pasillo:
- Este fin de semana he conocido a un profesor tuyo de Alicante, que es vecino de mi tía.
- No me lo digas. A Antonio.
- ¡Joder! ¿Cómo lo has sabido?
- Es igual. Sería muy largo de contar.

jueves, 6 de septiembre de 2007

Un paseo por Delft



Como ya me temía cuando empecé este blog, esto se mueve menos que los dedos de Doña Rogelia. Así que, para ver si se anima el tema, voy a poneros algunas fotos de mi última escapada, en este caso a Delft (Holanda) para asistir a un congreso.

Como casi todos los congresos a los que voy, la cosa se reduce a "voy, presento mi ponencia, y me vuelvo", todo esto en el menor tiempo posible. Pero en este caso, al ser la lectura el lunes, aproveché el domingo para darme un paseo con Marta por las bonitas calles de Delft.

Es una ciudad bastante antigua, y fue residencia de Guillermo de Orange (el de la guerra de los 80 años contra la España de Felipe II), que además está allí enterrado.

El centro de la ciudad está muy bien conservado, y parece un pueblo de cuento, con todas sus casitas con la fachada en pico, y aspecto medieval. Además, como en todo pueblo holandés que se precie de serlo, en la parte antigua del Delft las calles son en realidad canales.

Tal vez por ser una ciudad muy turística, la gente es agradable y se muestran amables siempre que se les pide ayuda. Resulta muy fácil desenvolverse si se sabe algo de inglés, lo cual se agradece, porque el holandés me parece el idioma más difícil de los que he oído.

Sin embargo, una cosa que si me sorprendió es la visión que tienen de España, al menos desde el punto de vista histórico; yo pensaba que nos verían casi con indiferencia, que España para los holandeses sería uno de esos países que hay por ahí abajo... pero, no! Resulta que somos los malvados ocupantes de su país durante un porrón de años, de los que les costó deshacerse nada menos que 80 años. Vamos, una cosa como aquí con los franceses.

Bueno, en realidad la cosa no es tan así. En el trato con los holandeses ni te enteras del tema, pero si visitas museos, o monumentos de la época (en Delft hay muchos, porque Guillermo de Orange fue precisamente quién llevó a cabo la guerra de independencia) en las explicaciones no salimos demasiado bien parados, y en su epitafio, Guillermo I nos pone pingando. ¡¡Y eso que se supone que los herejes eran ellos!!

Por cierto, que al susodicho Guillermo se lo cargaron precisamente a causa de la enemistad con España... y bueno, para cobrar la recompensa de 25000 coronas que había ofrecido Felipe II. "Asco de dinero", pensaría Guillermo. Aún puede verse un balazo en las escaleras de su casa.

En fin, una visita muy recomendable, con el aliciente de que no se necesita demasiado tiempo para poder ver lo más interesante de la ciudad. Bueno, no os canso más. Podéis encontrar más fotos del viaje aquí.

lunes, 16 de julio de 2007

Una Parábola

Entonces, Él dijo:
- En verdad os digo que y es igual a equis al cuadrado.
Los discípulos se miraron, y sólo tras dudar unos instante, Pedro se atrevió a preguntar:
- Això ques?
Él contesto, contrariado:- ¡Joer, Pedro! ¡una parábola!

Aquí os dejo, con cariño, una parábola sobre dos programadores, y su éxito e la vida. Porque a veces lo más importante en el trabajo no es ser bueno, si no darle al jefe lo que quiere (pofesionalmente hablando, se entiende).

domingo, 27 de mayo de 2007

Peces de colores

"S'ha momit", dijo Andrea cuando vio a 'Seis' inmóvil en el fondo de la pecera. Marta tuvo que enviarlo al mar, a que nadara con otros amiguitos. Hoy 'Cinco' ha seguido la misma suerte que 'Seis'.

Cinco y Seis eran los dos peces de colores que compramos hace quince días para Andrea. Poco han durado, los pobres. La verdad es que no imaginaba lo complicado que podía resultar tener dos peces naranja en una pecera. Cuando te los llevas a casa te lo pintan todo muy fácil; "con cambiarles una parte del agua cada dos o tres días, y darles de comer (no mucho) deberían durarte". La letra pequeña te la cuentan cuando vas a por el primer sustituto; "el agua nueva, que esté a la misma temperatura que la de la pecera", "si se la cambias menos a menudo, mejor".

¡Coño! Si hubieras especificado un poco más el primer día, no habría hecho falta coronar a Seis II.

Bueno, pues a pesar de la nueva política de cambios de agua, Cinco no ha sobrevivido. Y lo peor es que Seis II (en adelante, Seis a secas) no tiene buena cara; flota de lado en la superficie de la pecera la mayor parte del tiempo.

Lo de estar de lado lo achacamos a un defecto en la cola, ya que le falta casi un lado entero. Pero acabo de leer en internet que puede deberse a una inflamación en la vejiga, ¡porque no le remojamos la comida antes de dársela! Por lo visto se hincha cuando se la comen.

Así que añadimos a la lista de letras pequeñas "¡¡y remójale la comida durante unos minutos antes de dársela!!"

Ya veremos si el pobre Seis sobrevive hasta que le traigamos a Cinco II. Mientras tanto habrá que ir preparando la explicación para Andrea, que cuando la acostamos tenía dos peces naranja en su pecera.